jueves, 3 de septiembre de 2009

Contacto

Contacto es la única novela que escribió Carl Sagan (1934-1996), todos los otros libros que escribió fueron de divulgación científica.

Portada de la 1a edición de la novela "Contacto" de Carl Sagan, ed. Simon & Shuster, 1985.


La novela fue llevada al cine por Robert Zemekis en 1997.

Póster original de la película.

Originalmente "Contacto" fue desarrollado como guión para película, en 1979 (Carl Sagan y Ann Druyan terminaron el script en 1980) para Casablanca FilmWorks. Sin embargo, los estudios contrataron a otros guionistas para "retocar" la historia, además de que el ejecutivo encargado del proyecto, Peter Gruber, tenía sus propias ideas acerca del script.

En las notas a la novela, Carl Sagan declara firmemente que estaba dispuesto a fantasear e imaginar diferentes escenarios de ciencia ficción, pero rechazaba terminantemente cualquier compromiso para imaginarse, incluir o describir cualquier cosa irreal o fuera de toda posibilidad (por ejemplo, la descripción de extraterrestres -Sagan da un ejemplo de ese rechazo en su pequeña participación en el desarrollo de "2001: Odisea del Espacio"), sin embargo acepta totalmente la posibilidad del viaje hiperlumínico (más rápido que la luz), pero lo hace apoyándose en teorías científicas (los estudios de Kip Thorne acerca de los agujeros de gusano).

Casi toda la gente dedicada al cine piensa en las películas como una forma de espectáculo, no les interesa que algo científico y/o educativo pueda ser entretenido. Quizá por eso el guión original de "Contacto" entró en la dimensión desconocida, en animación suspendida, en lo que en argot cinematográfico se conoce como "infierno de desarrollo". Como el proyecto ya estaba empantanado, Sagan decidió retomar el script y hacerlo novela, lo que sucedió en 1985.

El productor original, Peter Gruber, dejó el cargo de ejecutivo en Casablanca en 1989 y se convirtió en el presidente de Sony Pictures Entertainmment tratando de comprar los derechos de filmación de Contacto, pero el guión había sido vendido a Warner Bros. y con la publicación de la novela, había recuperado su importancia.
Warner le hizo más "cambios y adaptaciones", empeorando tanto el guión que cuando quisieron contratar a Robert Zemekis como director, éste rechazó la película después de leer el guión ya "mejorado"; mucha gente quería que los aliens aparecieran físicamente en la película, ya en forma de ángeles rodeando la tierra o como humanoides exóticos en el centro de la galaxia, otros querían que la búsqueda de señales fuera una trama secundaria ante las tragedias de las relaciones humanas y de la política, hubo incluso quienes querían que un agujero de gusano transportara a toda la tierra al centro de la galaxia.



Ya cansado de los fracasos de filmación, WB contrató a Robert Zemekis como director, dándole control artístico total. A pesar de haber sido diagnosticado con mielodisplasia en 1994, Carl Sagan se reinvolucró en el proyecto recuperando la historia original y científica.
Todo el personal de la filmación veían "2001: Odisea del Espacio" como fuente de inspiración. Incluso, la novela tiene un capítulo llamado "Estación Grand Central", igual que uno de los capítulos de "2001: Odisea Especial".

La película se estrenó el 1 de julio de 1997. Desgraciadamente, Sagan murió el 20 de diciembre de 1996; obviamente la película está dedicada a su memoria.


Como Contacto empezó como guión cinematorgráfico, y el propio Sagan hizo la adaptación a novela, la película y la novela no tienen diferencias sustanciales, aunque -obviamente- la novela profundiza mucho algunos aspectos como:

Filosofía y religión.
Sagan siempre estuvo envuelto en polémicas ciencia-religión, siendo científico tuvo el privilegio de ver lo que es el concepto de ciencia pura, teoría e investigación, su popularización y divulgación, lo que es la charlatanería y sus trampas y lo que es la religión desde un punto de vista espiritual y filosófico, esto es, desde un punto de vista metafísico y teológico. El personaje Palmer Joss (Matthew McConaughey en la película) sintetiza este punto de vista de forma genial al compara su sentimiento del conocimiento de Dios con el sentimiento de Ellie Arroway por su padre fallecido hacía ya décadas. No se puede probar ni demostrar a los demás y sin embargo es algo cierto y poderoso.

La charlatanería (y el fanatismo) queda demostrado claramente en el personaje de Joseph (Jake Busey en la película): lo que uno siente o de lo que está uno convencido plena y totalmente es de uno, es algo íntimo y personal. Mostrarlo y explicarlo a otros está bien y es hasta recomendable. Pero cuando uno intenta intervenir en las opiniones y actitudes de los demás, cuando uno hace cosas para forzar a que algo suceda o no suceda solamente por las propias creencias de uno es cuando uno entra a los terrenos del fanatismo y a la violencia religiosa.


En la novela hay más debates religiosos y políticos y son más intensos; no es que la película sea una versión "light" o rebajada, lo que pasa es que es difícil contar todos esos detalles en aproximadamente 2 horas (la película dura 153 minutos, 2 horas y media, aproximadamente).
Sagan logró magistralmente una curiosidad filosófica: la dra. Arroway es científica, escéptica y agnóstica, pero hacia el final de la trama le toca estar en el banquillo de los acusados (literalmente), le toca defender un punto de vista espiritual y totalmente basado en la fe contra un jurado escéptico y agnóstico. Sagan fue genio y figura hasta la sepultura.

El otro punto que es revisado a profundidad en la novela y en la película no se tocó es:

Ciencia.
En la película, Ellie Arroway es la única viajera interestelar, en el libro, el transporte tiene asientos para cinco pasajeros; sin embargo, la experiencia es la misma: los viajeros experimentan a los extraterrestres en su mente a través de seres queridos vivos o ya desaparecidos, pero los extraterrestres le mencionan algo más a Ellie: que nadie sabe quién construyó el sistema de agujeros de gusano que conectan diferentes sistemas y que los creadores del universo -Dios o dioses- dejaron un mensaje en una de las constantes trascendentes.

Después de su regreso a la Tierra, la dra. Arroway se dedica a investigar al número pi, número trascendente que se supone tiene el mensaje de Dios.



Desarrolla un programa de computadora que calcule los decimales de pi y que los revise y compare en diferentes secuencias y bases numéricas. De esta forma descubre que los dígitos ya en el rango de 10^20 y en base 11 son una secuencia binaria que se puede descifrar; la longitud de esta cadena está dada por la multiplicación de 11 números primos. Esta y otras implicaciones y especulaciones igual de fantásticas y matemáticas fueron totalmente omitidas de la película.




Contactado inge y los mensajeros malditos.
Meshiko-Tenochtitlan 3.9.9
-------------- FIN DE TRASMISION ---------------------

1 comentario:

X dijo...

Buenisimo el post, Inge, yo he leido tanto el libro como la pelicula (si, la pel me la lei =P) y no em habia detenido a sopesar algunas de las implicaciones que mencionas!